viernes, 31 de agosto de 2012

El mundo está en caos porque las cosas están siendo amadas y las personas usadas
Jonathan Moldú

jueves, 30 de agosto de 2012

miércoles, 29 de agosto de 2012

Todos somos genios, pero si se juzga a un pez por su capacidad de trepar árboles, vivirá toda su vida pensando que es un inútil
Albert Einstein

lunes, 27 de agosto de 2012

Carlos Vamos

Es uno de tantos guitarristas totalmente desconocidos, pero absolutamente geniales.

De ascendencia hispano-germana, afincado en Amsterdam y diestro también en otras artes como la pintura.

De vida bohemia, no es extraño verle interpretar en plena calle.

Ha hecho del tapping su propio estilo a la hora de tocar la guitarra.

Y tiene temas tan increíbles como éste, grabado en un sola sesión:


Una auténtica pasada!!!

Espero que os guste.


sábado, 25 de agosto de 2012

El talento se educa en la calma, y el carácter en la tempestad
Johann Goethe

miércoles, 22 de agosto de 2012

El que tiene un mal día nunca se hace cargo que los demás también pueden tenerlo
Mª Jesús García

martes, 21 de agosto de 2012

Openbox para Ubuntu

Ya comenté en otra entrada que la última edición de Ubuntu me pareció (aparte de fea) muy pesada, y pude constatar que no iba todo lo fluida que debería en el mismo equipo en el que tuve versiones anteriores.
Y aunque existen muchas distribuciones que cuentan con Openbox como gestor de ventanas (entre ellas Archbang y Crunchbang), tal vez no queramos enredarnos con una nueva instalación.

Existe una solución muy sencilla para optimizar el rendimiento de nuestro equipo, conservando el sistema y haciendo que el consumo no sea un problema:
instalar Openbox.

Se trata de un gestor de ventanas minimalista, simple, altamente configurable, con un consumo mínimo de recursos, y por supuesto, compatible con otros entornos.

Para instalarlo tan sólo hace falta ejecutar:

sudo apt-get install openbox obmenu obconf

Con esta orden instalaremos el propio gestor de ventanas, una pequeña utilidad para configurar el menú principal, y unos cuantos temas y el programa que los maneja, para poder elegir el aspecto que más nos guste.


Para empezar a dar forma al sistema instalaremos también unas cuantas utilidades (básicas en mi opinión):

sudo apt-get install gmrun tint2 nitrogen lxappearance pcmanfm

Con esta otra orden habremos instalado (por orden) un lanzador de aplicaciones, un panel de sistema, una aplicación para establecer el fondo de pantalla, una aplicación para especificar parámetros del aspecto de nuestro nuevo gestor de ventanas y un navegador de archivos ligero.


Para configurar nitrogen tan sólo habría que especificar, en preferencias, qué carpeta contiene la imagen de fondo.

Uno de los archivos al que habría que prestar especial atención sería:

autostart (copiado con la orden cp /etc/xdg/openbox/* ~/.config/openbox/) en donde iremos especificando qué aplicaciones queremos tener activas al iniciar el sistema.

Podemos establecer un contenido inicial, tal que:

tint2 &
nitrogen --restore &

(Muy recomendable habilitar en autostart la línea gnome-settings-daemon).

De esta forma, al iniciar Openbox, tendremos automáticamente activos el panel de sistema y el fondo de pantalla.


Otro archivo importante sería menu.xml (copiado anteriormente también con la orden
cp /etc/xdg/openbox/* ~/.config/openbox/) en donde iremos especificando la configuración del menú principal, pero dado que puede resultar bastante pesado su mantenimiento, si no queremos enredarnos demasiado, recomiendo utilizar la aplicación obmenu, que desde un entorno gráfico nos da la posibilidad también de configurar el menú principal de una forma bastante más sencilla e intuitiva.

Recomiendo incluir una nueva entrada en el menú que ejecute el lanzador gmrun.


Para personalizar algo el aspecto podemos ejecutar lxappearance en donde podremos elegir, entre otros parámetros, el set de iconos (previamente descargado y movido a /usr/share/icons).


En este punto lo único que queda pendiente es cerrar la sesión actual y elegir Openbox desde el LoginManager.


Hay que tener en cuenta que esto es sólo el principio, y que a partir de aquí, las posibilidades son infinitas.

Con tiempo y paciencia podremos terminar teniendo entornos tan personalizados como estos:




Espero que os sirva.

viernes, 10 de agosto de 2012

Se necesitan dos años para aprender a hablar y toda una vida para aprender a callar
Ernest Hemingway

jueves, 9 de agosto de 2012

La realidad de la que podemos hablar jamás es la realidad en sí
Werner Heisenberg

miércoles, 8 de agosto de 2012

Hartmann - Balance


Nuevo disco de Hartmann, o más bien habría que decir de Oliver Hartmann en solitario,
ya que aparte de dar nombre al grupo, compone, canta y toca la guitarra.

En una tendencia de caída libre,
con un primer disco buenísimo (Out in the cold), un segundo mediocre (Home) y un tercero malo (tristemente llamado III),
las perspectivas para este cuarto disco eran horribles.

Por suerte el cambio de discográfica ha sentado bien y este disco rompe la tendencia.
Grandísimo disco!

Hard rock muy melódico y muy cuidado, combinando muchas alternativas (e influencias),
todas en su justa medida,
haciendo que el nombre del disco no esté puesto al azar.

Destacan All my life, Like a river y Fool for you en un gran comienzo.

El medio tiempo sinfónico After the love is gone y la AOR/progresiva Save me ponen muchísima calidad.

Como curiosidad, Dance on the wire comienza con un riff prácticamente idéntico a Sweet home Alabama de Lynyrd Skynyrd.

Y lo mejor para el final;
con una versión genial del Shout de Tears for Fears, que gana muchísimo en clave de rock,
y dos baladas de enormes estribillos,
una tranquila, Time to face the truth.
y la otra más emotiva, The best is yet to come,

12 canciones nuevas que resucitan al mejor Hartmann.
Alegra ver de vuelta a artistas que han estado despistados durante algún tiempo.

Recomendabilísimo!

jueves, 2 de agosto de 2012

Linux y el falso ahorro

En tiempos de crisis como los que corren y en los que llevamos unos cuantos años ya,
parece haberse puesto de moda apuntarse al carro del software libre; por la sencilla razón de que es gratuito.

Buena parte de culpa en este auge del software libre la están teniendo las administraciones públicas,
que en un bonito gesto ante tanto despilfarro, intentan ahora ahorrar de donde pueden, eliminando de sus gastos la renovación de licencias de Microsoft.

Como medida de ahorro parece ser una buena idea pero,
¿Qué hay detrás de esta maniobra?

Parece un intento desesperado de hacer ver que los políticos también saben apretarse el cinturón y gestionan bien el dinero público, no malgastando donde no deben.
Pero no se cuenta en ningún sitio qué coste tiene este cambio ni tampoco qué subvención se recibe por adoptar dicha reforma.

¿Qué pasa que si no hay subvención europea nadie adopta esta medida?
Parece que no, en este país si no está bien patrocinado, nadie hace nada por amor al arte, ni siquiera por ahorrar.

Por otra parte, y teniendo en cuenta que Linux ya de por sí es gratuito,
¿Qué necesidad hay de coger un producto gratuito y gastar en él tiempo y dinero para crear otro producto gratuito?

Casi todas las Comunidades Autónomas tienen su propio sistema operativo, derivado de Ubuntu (derivado a su vez de Debian).

Tras un lavado de cara corporativo, nos presentan todas estas distribuciones como sistemas operativos únicos y propios (y distintos),
que ponen a sus Comunidades a la vanguardia de la tecnología.

Puedo constatar que en el caso de Guadalinex el lavado de cara ha servido para dejarlo muy bonito, pero errático, y por tanto inservible...
Espero que otras distribuciones no hayan tenido el mismo fin, pero me temo lo peor...

¿No se ahorraría aún más si directamente se usa Ubuntu (o Debian, o la distribución que nos parezca) en lugar de gastar modificándolo?

Extremadura parece haberse dado cuenta de ello, tras comprobarlo a posteriori...

Por útlimo, metidos ya en ahorro, con perspectiva, y aportando algo de sentido común,
¿No sería más sensato que todas las administraciones públicas del país unificaran criterio adoptando el mismo sistema operativo gratuito?

Si estamos dispuestos a ser libres (informáticamente hablando), hagamoslo bien, y hagamoslo completamente;
sustituyamos los productos Microsoft y evitemos pagar sus licencias utilizando productos gratuitos ya existentes (a elegir entre miles de distribuciones Linux),
invirtiendo el menor gasto posible de tiempo y dinero en el proceso de conversión de una tecnología a otra.

Cualquier otra cosa, bajo mi punto de vista, es un despilfarro más;
y en este caso concreto, encubierto.

miércoles, 1 de agosto de 2012